AleNatalia
4 min readMay 6, 2020

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Un no funeral pero sí un homenaje, así despidieron las trabajadoras sexuales a Jaime Montejo

Jaime Montejo junto con Elvira Madrid son fundadores de Brigada Callejera, ambos se enfermaron en la pandemia que hoy azota al país, ella no pudo despedirse de su compañero de vida, se encuentra en casa recuperándose, pero la zona de trabajo sexual de Revolución organizó un homenaje.

Altar a la memoria de Jaime Montejo, fundador de Brigada Callejera. FOTO: Sofía Magón.

Un tendedero de cartulinas rojas y blancas sustituyó los abrazos; el vallenato mitigó las lágrimas y las consignas de solidaridad y gratitud salían de las gargantas de mujeres (cis) y mujeres trans. En una de las pancartas se leía una modificación a una estrofa de la canción de tropa vallenata: “los caminos de la vida no son como los imaginaba, pero tu caminar los hizo más dignos y rebeldes. Te amamos Jaime Montejo”. Colombia fue el país que lo vio nacer pero en México echó raíces.

No había un féretro al que hacer guardias, pero sí fotografías que mostraban su activismo en pro al trabajo sexual y contra la trata y el VIH, el respeto por los perros y una escena de un cómic que mostraba un proyecto de comunicación libre y comunitaria, enfocado en informar sobre el trabajo sexual y los abusos en el medio: “Noti-Calle”, que la madrugada del cinco de mayo perdió a su pluma fundadora.

Noti-Calle, el medio independiente que fundó Jaime Montejo. FOTO:Cortesía.

Las complicaciones derivadas por el COVID-19 pararon el corazón de Jaime Montejo, pero el epitafio de: “la rebeldía es la vida, la sumisión es la muerte” inmortalizó el modo de actuar de quien semanas antes alimento, en un comedor comunitario itinerante, a las trabajadoras sexuales que por la crisis sanitaria hoy no tienen ingresos, comida ni apoyos gubernamentales.

Trabajadoras sexuales se preparan a las afueras del Metro Revolución para hacerle un homenaje Jaime Montejo que murió de COVID-19. FOTO: Sofía Magón.

La palmera atrás del metro Revolución, que se ubica sobre puente de Alvarado fue el sitio de la despedida, sin cuerpo presente,no había una velación, era un acto de rebelión y solidaridad mientras un improvisado rosario se rezaba, en las bocinas de la alcaldía Cuauhtémoc se escuchaba “quedaté en casa”. Quizás los transeúntes no saben que muchos de las y los presentes no tienen casa y el gobierno capitalino da una instrucción pero no así opciones de refugio y alimento.

Trabajadoras sexuales arreglan el altar a la memoria de Jaime Montejo. FOTO: Sofía Magón.

Rostros con cubrebocas, caretas, manos con olor a gel antibacterial o con guantes era parte del panorama entre los asistentes al no homenaje. El grito colectivo de: ¡Respeto total al trabajo sexual! los aplausos, los vivas, los gracias y los gritos que derivan en llanto.

La defensa de las personas que se dedican al trabajo sexual perdió a un activista que dedicó más de 30 años, de sus 56 de vida, a defender a quienes tienen las calles cómo su espacio laboral.

Jaime y Elvira cuando empezaron Brigada Callejera.

Jaime Montejo junto con Elvira Madrid son fundadores de Brigada Callejera, ambos se enfermaron en la pandemia que hoy azota al país, ella no pudo despedirse de su compañero de vida, se encuentra en casa recuperándose, pero la zona de trabajo sexual de Revolución escribió sus mejores deseos para ambos en una libreta y en cartulinas, entre las que se leía:

“Elvira la vida sigue, las chicas trans estamos con usted y la lucha sigue, te necesitamos, te queremos, Att: Karla Ivett”.

“Elvira tú estás con nosotras, eres muy guerrera y tienes que salir adelante, con todas nosotras, te queremos mucho”.

“Elvira gracias por todo, hay que salir pa’ lante, con fuerza cómo siempre, cómo el ejemplo que nos puso Jaime Montejo, guerrear hasta el fin. Que dios lo bendiga en el cielo y nos guarde un cachito de su sabiduría y ejemplo. Bendiciones. Att: Tonale”.

Con pancartas y escritos despidieron a Jaime Montejo las trabajadoras sexuales y enviaron mensajes de apoyo a su compañera de vida.

Los gritos de “Jaime, revolución está contigo” se mezclaron entre otra proclama: ¡Jaime, Revolución siempre! Otras voces desgarradoras preguntan a los asistentes: ¿Como decía Jaime? y la respuesta retumbó con un ¡Respeto total al trabajo sexual!

El himno zapatista sustituyó a los rezos y de una pequeña bocina salía los versos de “ya se mira el horizonte,combatiente zapatista, el camino marcará a los que vienen atrás”.

Y antes de retirar el sonido la canción de “resistiré” en voz de los muertos de cristo despide a Jaime y envía un mensaje a Elvira: “resistiré, para seguir viviendo, soportaré los golpes y jamás me rendiré y aunque los sueños se me rompan en pedazos, resistiré, resistiré”.

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AleNatalia

Periodista. Sigo pensando que los principios no se negocian y que hay que buscar el estado ideal del ser para no ser el ser ideal del Estado